LIBROS

DIOS SOMOS NOSOTROS

Entrevistas

JS: Permítanme que les presente al autor del presente libro. Se llama Jorge Bas Vall. Se graduó como Arquitecto Urbanista en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Barcelona. Cuenta que al cabo de tres años de exitoso ejercicio profesional, una noche ventosa de otoño, parecida a la de hoy, pero en invierno, en el silencio de su estudio profesional se preguntó si toda su vida iba a consistir en ser un brillante arquitecto. La respuesta fue que de esto, nada. Se dijo que no. Al cabo de unos meses en el año de 1977 se licenció en el programa de Meditación Transcendental en la Maharishi European Research University en Suiza, y  en distintos grados superiores con posterioridad en la misma Universidad. Desde entonces ha sido profesor del programa de Meditación Transcendental por todo el mundo y ha trabajado mucho tiempo en contacto directo con Maharishi Mahesh Yogi, su fundador, desarrollando importantes proyectos educativos en América Latina y el Caribe. A lo largo de los años ha residido en ocho países distintos  y ha estudiado sus tradiciones milenarias de conocimiento en diferentes universidades. Hoy en día, Jorge Bas Vall puede considerarse sin ninguna duda un especialista en el estudio de la Consciencia y del ser humano como una de sus manifestaciones entre otras cosas. Bienvenido, buenas tardes caballero.

Cómo se pronuncia esto: Maharishi Mahesh Yogi…

JBV: Maharishi Mahesh Yogi, Maharishi European Research University.

JS: ¿Y eso fue una iluminación, una tarde de otoño?

JBV: No, la idea es que en aquel tiempo, los años 70, había mucho interés en saber quiénes éramos, cómo era la vida, y yo me encontré haciendo de Arquitecto precisamente aquí en Almería. Estaba encantado con la profesión, pero de repente me cuestioné si toda la vida iba a consistir en ser un brillante Arquitecto. Me dije que no. Cuando era pequeño, les preguntaba a todos los abuelos que estaban tomando el sol en la calle, qué les había parecido la vida, y todos me decían que muy mal. Estaban un poco decepcionados, un poco tristes, y, sobre todo, con un evidente miedo a morirse. Entonces yo, a los siete años, pensé: ¿Vas a terminar así? Pues, más vale que te lo vayas planteando  porque todavía tienes tiempo.

Y la verdad es que durante toda la vida he alternado el ejercicio de la profesión de Arquitecto con el estudio de la Consciencia humana Y la realidad es que este libro es el fruto de treinta años de continua investigación.

JS: Dios somos nosotros, este libro que tengo en mis manos se presenta pasado mañana en la librería Picasso, a las siete y media de la tarde por Ediciones Carena. Por si quieren acercarse y conocer a su autor.

Treinta años estudiando la Consciencia humana.

¿A qué conclusión se puede llegar, o ha llegado usted?

JBV: He observado claramente que en todas las tradiciones milenarias hay algunas incógnitas que todavía no hemos resuelto. Y algunos pasajes que todavía no hemos interpretado correctamente.

La conclusión es que como seres humanos necesitamos todavía un salto evolutivo superior. ¿Porqué?

Pues, porque tenemos una Naturaleza mucho más amplia de lo que pensamos, y lo desconocemos.

¿Qué sabemos nosotros del Ser Humano?

Que somos animales racionales.

Bastante animales, y bastante racionales.

Pero la pregunta es: ¿Es eso todo lo que podemos ser?

Y la respuesta es: NO.

¿Dónde está el secreto de nuestra verdadera Naturaleza, y de nuestro futuro? En ser lo que tenemos que ser: Ser humanos de pleno derecho.

¿Dónde nos equivocamos, dónde metimos la pata, dónde nos despistamos?

Pues oiga, el Génesis lo dice bien claro:

Nuestros primeros padres, Eva, dando una vuelta por el jardín del Edén, va, y de repente alguien le dice, ¿porqué no te comes esta manzana?

¿Qué manzana?

El fruto del árbol de la Ciencia del Bien y del Mal. Según cuenta el Génesis maravillosamente. Entonces Eva, por lo que sea, decidió comer la manzana libremente, y allí parece que nos metimos en un lío.

¿Qué lío, y cómo interpretamos este hecho que de pequeño me gustaba mucho?

Nosotros tenemos una línea evolutiva de millones de años, y llegó un momento en que uno de nuestros antepasados de repente se miró, y dijo: ¿ese soy yo? Tuvo de repente la consciencia de que él existía.

¿Oiga, y esto cómo ocurrió? Es muy simple.

Un gatito y un perrito, adorables, tienen consciencia de una serie de necesidades, pero no tienen consciencia de sí mismo, de que existen. No la tienen. ¿Porqué? Porque les falta un poco de evolución. Pero nosotros, llegó un momento que la tuvimos.

Muy bien. Oye, pero ese soy yo.

Ahí, por primera vez en millones de años, nosotros tuvimos consciencia de nuestra propia existencia. Y no solo de esto, si no de que pensábamos. Podíamos pensar: aquello lo haré de esta manera, esto lo haré de la otra. Y entonces ahí tuvimos dos opciones: ser conscientes de nosotros y de todo lo que nos envuelve, del Universo, y de todos los millones de Universos que existen, o, quedarnos centrados en el proceso de reflexión: ahora pienso, ahora hago esto, y decido no sé qué.

Entonces confundimos consciencia con proceso de reflexión. Y nos quedamos enganchados en el proceso de la reflexión. ¿Esto que quiere decir?

Proceso de reflexión quiere decir quedarnos enganchados en lo que la mente decide. Y la mente, por sistema, por estructura, es un elemento dual. Bien, mal, negro, blanco, y además fracciona: este y yo, y el otro. Estamos en un universo dual del cual nos gustaría salir, pero no salimos.

JS: Jorge, ¿no cabe preguntarse quién ha moldeado nuestra mente? Porque da la impresión de que aquí lo que se rige es el pensamiento único.

JBV: Muy buena pregunta, Joaquín.

¿Quién ha moldeado nuestra mente? Nosotros.

A ver, fíjese, cuando nosotros decidimos o súbitamente nos dimos cuenta de que pensábamos, lo primero que hicimos es crearnos a nosotros mismos. Es decir, yo soy fulanito de tal, y a partir de ahora yo soy yo y usted es usted. Nosotros, en el fondo, somos una invención de nuestro propio proceso de pensar. De acuerdo, la mente en realidad no existe. ¿Qué existe? Un cerebro magnífico, desarrolladísimo, con un poder neurofisiológico increíble, que puede pensar y, de hecho, emite pensamientos. Bien, pero nosotros nos hemos fabricado una mente y una personalidad con este proceso de pensar. Y allí hemos confundido la consciencia con el proceso de reflexión.

Una confusión evidentemente muy desarrollada a lo largo del tiempo, cuyo máximo representante es  Descartes en su Discurso del Método. Pienso, luego existo. Bien. ¿Y eso que quiere decir? Que atribuimos toda nuestra existencia al hecho de pensar. Falso.

Entonces la manzana famosa no era una prohibición. No comáis de este árbol, sino una prevención. Cuidadito con este árbol, porque este árbol os meterá en un proceso de sufrimiento, de esclavitud, y de muerte.

Pues sí. La manzana fue asumir el universo dual de la mente, la identificación con el proceso de pensar.

¿Qué otras alternativas propone este libro?

Mucha gente ya ha propuesto durante la historia: oiga, el cerebro es magnífico, el proceso de pensar es maravilloso, pero hay más cosas.

¿Cuál es el asunto?

Dejar de identificarnos con el proceso de pensar, con el ego, y con la falsa naturaleza del Yo que hemos creado. Y simplemente integrarnos con nuestra Naturaleza.

JS: Y construir una nueva persona, una nueva identidad…

JBV: Construir lo que realmente toca construir: nuestra integración con todo lo Creado para empezar, y luego nuestra integración con toda la Infinitud para acabar.

JS: Hablando de la manzana, Jorge, siempre me pregunté por qué fue Eva y no Adán el que le dio el bocado.

JBV: Una cuestión delicada…

Cuestión delicada pero, mire, todos los escritos antiguos son magníficos y adorables. Hablan de cosas magníficas, pero todos están escritos por alguien. Creo que se responsabilizó a Eva porque el texto lo escribió algún hombre.

JS: Dios somos nosotros, el título de un libro que, de verdad, muy interesante, muy sugerente. Una pregunta… En estos años que ha viajado como antes he comentado por diferentes países, ha conocido diferentes culturas, y variedad de gentes… ¿Nos parecemos tanto, o somos diferentes? Desde el punto de vista de la Consciencia, por ejemplo, que usted antes ha apuntado.

JBV: Los seres humanos somos exactamente lo mismo. Lo que pasa es que hemos utilizado la capacidad de pensar para crear personalidades diferentes, culturas diferentes, religiones diferentes, y ahí están las diferencias. Mire, además, la sociedad presente lo dice bien claro. Cuando uno dice que sí, el otro dice que no. ¿Porqué? Porque la mente funciona así. Quiere diferenciarse, quiere imponer su criterio. Entonces estamos en una humanidad de criterios, de luchas, de puntos de vista antagónicos, y todo el mundo quiere tener razón. Señores, esto es una fantasía. La auténtica realidad es que todos los seres humanos tenemos una Naturaleza Infinita, todos los seres humanos podemos ser Eternos, y todos los seres humanos podemos ser Uno con Dios. No dioses, porque Dios no tiene competencia. Hemos fabricado un dios mental, pero decir que somos dioses es una tontería. Nosotros solamente podemos ser o una miseria, o pura Infinitud. Y ese asunto ha llegado el momento de planteárselo seriamente.

JS: ¿Y esto está en nuestra mano?

JBV: Sí. Y el libro plantea precisamente por qué no nos hemos dado cuenta. No hemos hecho ningún pecado, simplemente nos hemos equivocado de camino. Hemos cogido una puerta de salida distinta a la que teníamos que coger, y en lugar de meternos en el Salón del Trono nos hemos metido en el sótano. ¿Y ahora qué?

JS: Queremos salir del sótano…

JBV: ¡Claro!

JS: Es normal que le atrapara Almería cuando llegó. ¿Cuándo estuvo aquí en la década de los setenta?

JBV: Yo llegué a Almería el diez de Marzo del 72. Precisamente para hacer las Prácticas de Milicias en el campamento Álvarez de Sotomayor.

JS: En Viator.

JBV: Sí, en Viator. Ahora se llama el campamento de La Legión, creo. Por esta razón estuve mis primeros cuatro meses en Almería. Afortunadamente, a mí, por una selección de personal que hicieron al entrar, me nombraron miembro del Departamento de Psicología del campamento. Entonces yo llegaba a las 10 de la mañana, me presentaba ante mis Superiores, y me iba a las 11 después de haber desayunado. Y durante los primeros 15 días del nuevo reemplazo de soldados recién llegados, les hacíamos laboriosos exámenes psicotécnicos a todos los soldados. Trabajé intensamente solo 15 días. Pero la permanencia tuvo que ser diaria. Entonces, cuando salía del campamento cogía el coche y me perdía. Decía, ahora me voy a perder por este camino para ver a dónde me lleva, y oiga, quedé fascinado. Almería es fascinante. Y cuando decidí trasladarme a vivir aquí, mis amigos me decían: Oye, guapo, ¿porque te vas si en Almería no hay nada?

JS: Por eso mismo…

JBV: Y yo los miraba, y les decía: ¡Porque me gusta!

Y siempre me ha gustado.

Mire, yo creo que Almería tiene un componente que no tiene ningún otro lugar de España. Creo que es una naturaleza geomagnética que influye muy notablemente en el sistema neurofisiológico. O sea, Almería posee una poderosa Biogeología. La Biogeología es una ciencia poco conocida, que estudia cómo el sujeto se siente en una posición geográfica debido a su estructura geomagnética y al contenido del subsuelo. Pues, oiga, yo me quedé muy sorprendido porque aquí en Almería, al cabo de muy poco me dije: Este es tu sitio.

JS: Magnetismo absoluto, el de esta tierra.

JBV: Sí

JS: Tengo aquí un artículo, una entrevista que le hicieron en una página de La Voz de Almería del año 1975, nada más y nada menos. Y el título del artículo dice así: La originalidad se mide por otra escala de valores. Se está donde se está bien. Lo que existe es un error de diseño. Un artículo que exhibe su punto de vista como el Arquitecto que es usted. Trabajó en Almería, abrió despacho en una calle que se llamaba Avenida del Generalísimo. Hay que retroceder hasta el año 75 para recordar ese nombre. ¿Esa etapa de profesión en Almería qué tal fue?

JBV: Después de terminar las Prácticas de Milicias me quedé un mes de vacaciones en Almería, y luego subí a Cataluña que es mi origen natal. En Septiembre estuve un mes en Estados Unidos, San Francisco y los Ángeles, con amigos de mi profesión, y en la primavera siguiente cogí un camión, metí todas mis cosas, cerré el estudio en Barcelona, y me vine aquí. Me instalé en Aguadulce, y abrí un despacho de Arquitectura en la Avenida del Generalísimo de Almería. Un edificio magnífico, en la tercera planta, y me dije que este era mi maravilloso lugar. Desde entonces empecé a hacer proyectos, y todos fueron importantes.

JS: Perdón, ¿Qué obra suya hay en Almería que veamos a diario, y que no sabemos que es usted el Arquitecto?

JBV: Mire, yo trabajé lo más importante en Urbanismo. Hice un Plan Parcial de 700 hectáreas que cogía Agua Amarga, Carboneras, y una parte interior de Níjar. Este Plan lo aprobó el Generalísimo Franco en su último Consejo de Ministros porque era un Plan que incluía territorios que eran propiedad del Estado. Es decir, la mesa Roldán por ejemplo, es propiedad del Estado. Entonces estos Planes Parciales los aprobaba el Consejo de Ministros de España. Este Plan fue magnífico, y luego hay por aquí algunos edificios. Pero lo pasé muy bien en un despacho que duró cuatro años magníficos, y en el que casi todos los proyectos salían publicados en la Prensa.

JS: Desde su punto de vista de Arquitecto y ciudadano, cuando pasado los años echa un vistazo a esta ciudad, y a algunos rincones de la provincia, le pregunto cómo Arquitecto, y si es tan amable, ¿cuál es su opinión de cómo se ha construido en estos últimos años?

JBV: En estos últimos años Almería, en general, tiene mucha coherencia arquitectónica. Pero tal como ya se escribía en la entrevista de La Voz de Almería, las ciudades y los pueblos, no son solamente sus edificios. Sus edificios reflejan en lo profundo una coherencia interna.

Los pueblos de Almería son encantadores, y Almería capital también. Yo soy un enamorado de Almería, y cuando vengo ahora, y  me paseo por arriba y por abajo, sigo disfrutando mucho. Veo edificios de todos los tipos, pero ¿es importante si los edificios son más bonitos o más feos? No, lo importante es como  uno se siente en el lugar. De todas maneras, se mire por donde se mire, Almería es una ciudad que respira buen gusto, un gusto histórico y clásico, perceptible al margen de conceptos y de ideas.

JS: Y a Dios gracias…

JBV: Pero lo importante es que aquí se está bien. Y el titular del periodista es Se está donde se está bien, porque me preguntó si aquí en Almería había sitios donde se estaba mejor que en otros, y porqué estaba yo aquí. Oiga, querido amigo, uno se sienta en el sitio donde se está bien, no porque sea bonito o porque no sé qué…

JS: Permítame una última pregunta. Hemos comenzado hablando de este libro para los interesados que quieran asistir pasado mañana a la presentación en la librería Picasso, a las siete y media de la tarde, del libro Dios somos nosotros, de Jorge Bas Vall.

Como Catalán que es usted, ahora quiero saber su opinión sobre una cosita. Vamos saltando de un tema a otro.

¿Por qué quieren los catalanes, varias partes de la sociedad, o una pequeña parte de la sociedad catalana, independizarse de España? ¿Está usted de acuerdo con esto?

JBV: NO.

España es un país inmenso y coherente.

Yo creo que todas las diferencias vienen de los Íberos y de los Celtas, los primeros pueblos bárbaros que entraron en España. En Cataluña se fabricó una mezcla de Íberos y Celtas que se llamaron los Celtíberos. Y esos Celtíberos se pelearon enseguida con los Íberos y los Celtas por razones sanguíneas, familiares, políticas, y salvajes. Ahí, que es un registro muy antiguo, empieza a verse el crudo y prehistórico origen de la divergencia de los Catalanes.

Acerca de su pregunta acerca de mi posición:

Yo no soy Catalán, yo soy Universal.

Pero si quiere que le diga la verdad, no puedo evitar el haber nacido en Cataluña. Es inevitable. ¿Pero quiere decir esto algo más que una imposición de la existencia?

Pues, no

Señoras y señores, creo que tenemos que progresar como seres humanos, y llegar a la coincidencia de que en lugar de la diferencia hay que potenciar la similitud.  ¿Tenemos cosas en común? Oiga, no es que tengamos cosas en común, es que somos la misma Naturaleza, y nos perdemos en situaciones ilusorias de fragmentación geográfica, en confusiones financieras, o en falsedades de Ley.

Oigan, seamos un poco más razonables que esto ya ha llegado a su fin. Lo del animal racional que se pelea con su vecino, ya se ha terminado. Y si no se acaba, se acabará de golpe. Seamos razonables, dejémonos de tonterías, somos la misma Naturaleza, y ya empieza a ser hora de que nos demos cuenta de que este vecino, aunque sea no sé qué, no sé cuántos, no se quintos, es lo mismo que tú.

JS: Es cierto, esa es la esencia…

Me gustaría seguir hablando con usted en otro momento, si le apetece, Jorge.  ¿Vale?

JBV: Cuando usted quiera.

SJ: Ha sido un placer conocerle. Gracias por la visita.

JBV: Gracias a ustedes por su amabilidad.

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